MODUBEOS POR EL MUNDO

CRÓNICA "THE WALL"

"THE WALL" es la carrera de ultra fondo más icónica del Reino Unido. Hay otras muchas carreras de ultrafondo más duras, más largas, pero ninguna con el trasfondo histórico, la belleza paisajística, la organización y el número de participantes y animación de esta prueba. Es una prueba de 69 millas o lo que es lo mismo 111 km, que discurre de costa a costa en el norte de Inglaterra en la frontera con Escocia siguiendo el trazado del Muro de Adriano (Construido por el emperador romano del mismo nombre para defenderse de las tribus bárbaras de lo que hoy se conoce como Escocia). La carrera comienza en el castillo de Carlisle en la costa oeste de Inglaterra y finaliza 111 km después en el millenium bridge en Newcastle en la costa Este. Existen varias modalidades: Experto (prueba que yo seleccione) en la que hay que finalizarla en menos de 25 horas y challenger donde se puede hacer en dos días haciendo noche en un punto intermedio (km 49). En ambos casos individual o por equipos de dos, tres o cuatro componentes, e incluso por relevos. El circuito discurre por carreteras locales con apenas tráfico, bocaminas, sendas, prados y tramos cortos de todo terreno. La carrera es una prueba en semi-suficiencia, lo cual quiere decir que hay que correr con un equipo mínimo compuesto por: mochila con 1l de agua, 100 kcal de comida, teléfono, silbato, chubasquero/corta vientos, pantalón impermeable/mallas largas, botiquín, linterna frontal, pilas de repuesto, plano y prenda de cabeza. Además, la organización transportaba a un punto intermedio (km49 aprox) una bolsa por corredor con el material que este considerará necesario. No es una prueba en semi-suficiencia al uso, pues aquí la organización si que montaba varios Pit Stops (puntos de avituallamiento) a lo largo del recorrido donde se podía reponer líquidos y sólidos. El problema es que estos estaban bastante separados (en algunos casos más de 20 km), lo que hacia necesario el correr con agua y algo de comida para reponer fuerzas entre Pit Stops. La idea de correr esta prueba me surgió tan pronto como oí hablar de la misma. De hecho me inscribí con un año de antelación para marcarme una meta clara y que no me echara para atrás. No hay límite de inscripción. Este año el número de corredores se acerco a los 1000. El entrenamiento específico lo comencé a la vuelta de vacaciones de Navidad, con lo que entrené algo menos de 6 meses. Más que suficiente... La entrega de dorsales se efectuó el viernes 21 de junio en el castillo de Carlisle. Al retirar el dorsal se entregaban las bolsa de mitad y de final de carrera para que la organización los transportara a dichos puntos el día de la carrera. Además del dorsal se recibía el Sport Ident (chip de carrera). Con esto a la cama y a esperar que nos deparaba el tiempo al día siguiente, pues la previsión era que iba a llover bastante a lo largo de todo el día.

La carrera comenzaba el sábado a las 0700 para los "expertos" y a las 0800 para los challengers. La mañana se levantaba algo fresca y con el cielo en la lejania más negro que el sobaco de un grillo, lo cual generaba dudas a la hora de seleccionar la ropa con la que empezar la carrera (por un lado para no ir demasiado abrigado y por otro para no pasar frío). Comenzamos la carrera puntuales a un ritmo trotón atravesando varios parques de la ciudad por sendas estrechas donde no se podía adelantar ( la verdad es que a estas alturas de la carrera y teniendo en cuenta lo que nos quedaba por delante tampoco tenía mucho interés en gastar energías tan pronto) Poco a poco nos fuimos alejando de la ciudad acercándonos a tierra de nadie ,(vastos espacios desolados por los que discurre el muro) devorando los primeros kms, cogiendo velocidad de crucero. El pelotón se iba estirando y se iba haciendo la selección natural de grupos de carrera en función del ritmo. Pasamos el km 10, el 20 y nadie dejaba de correr para empezar a andar, allí todo el mundo corría, a diferencia de otras carreras en España donde la gente comienza a andar más temprano, lo cual me trastoco un poco mi plan de afrontar la carrera. De este modo yo también seguí corriendo con el resto del pelotón. Así llegamos a la milla 20 (foto inferior).

Y ya, a partir de este momento yo comencé a intercalar CACO ( caminar / correr), pero siempre corriendo más que andando (en ningún caso más de 50 minutos seguidos) La meteorología hasta ahora tal y como las previsiones avanzaban, sin ser todo lo positiva que pudiera ser tampoco era mala, pues intercambiaba chaparrones (algunos de granizo) con sol, por lo que lo que nos mojaba la lluvia, nos lo secaba el sol. El único problema era el continuo quitar y poner del impermeable. A las 12:30 (solo 5 horas 30 en hacer unos 49 kms. La carrera era muy rápida. Si era capaz de mantener ese ritmo haría un muy buen tiempo) llegue al punto de avituallamiento intermedio (que en realidad no estaba en el medio de la carrera, pues estaba en el km 49). Este punto estaba en el mismo emplazamiento que Vindolanda (antiguo asentamiento y fortaleza romana). Aquí nos pusimos ropa seca, nos cambiamos de calcetines, reportamos algo de comida y.... A correr de nuevo La organización sin llegar al nivel ni mucho menos de las carreras Modubeas impresionante. Nada más dejar el avituallamiento nos esperaba una subida a machete campo a través a uno de los puntos más altos del recorrido (no era muy larga, pero si muy empinada). Nos esperaban los kms panorámicos más bonitos de la carrera corriendo en sendas y prados junto al muro en mitad de la nada con paisajes espectaculares. Ya por la tarde las nubes fueron desapareciendo, dando paso a un sol en muchos momentos de justicia, llegando a hacer hasta calor y con un ligero viento decola. A partir del check point del km 90 Los kms empezaban a pesar y las millas empezaban a ser largas, muy muy largas, demasiado largas. Los grupos de carrera ya estaban hechos y casi todas las caras eran familiares, pues en función de los ritmos de carrera de cada uno, unas veces yo los adelantaba y otras veces me adelantaban a mi, para repetirse el ciclo de nuevo otra vez. En este punto de la carrera ya habíamos descendido de los montes y estábamos corriendo a nivel del río (prácticamente llano). Pasado el último checo point, sólo quedaban por delante 7 millas (11,2 kms aprox). A falta de unos 8 kms se me unió un corredor de Cambridge, y ya no nos separamos hasta la línea de meta, forzando me el en unos casos a n dejar de correr y en otros siendo yo el que le forzará a el. Los últimos kms fueron muy largos, pues ya corriendo dentro de Newcastle pegados al río, parecía que nunca íbamos a llegar a la meta, pues no alcanzábamos a ver el Millenium Bridge. Este estaba después de una curva del río, una vez que lo vimos, entre aplausos y animación de la gente, la llegada se hizo mucho más cómoda, llegando a pasar a otros 5 corredores en estos últimos centenares de metros. Por fin alcanzamos el puente, lo cruzamos, y ...la meta y el fin de la carrera. 13 horas 39 minutos. Puesto 55 (un éxito, pues mi meta solo era el acabar en las mejores condiciones posibles. En resumen, una gran carrera y una gran experiencia recomendable para todo corredor de ultratrail.